La palabra “obesidad” deriva del latín ‘obesus’, que quiere decir “persona que tiene gordura en demasía”. Ésta se caracteriza por la acumulación y almacenamiento excesivo de grasa, principalmente en el tejido adiposo. Se manifiesta por un incremento de peso mayor al 20% del peso ideal esperado por la edad, la altura y el sexo.
La forma habitual de definir y clasificar la obesidad es la comparación del peso del niño con el de una población de niños con peso ‘normal’. La realidad es que cada vez se usa más el Índice de Masa Corporal (IMC), pero en el caso de los niños, deben tenerse en cuenta la edad y el sexo, ya que el IMC normal cambia con la edad de forma diferente en niños y niñas.
La obesidad infantil es un gran problema, ya que, en un gran porcentaje, el niño obeso será un adulto obeso. La enfermedad implica además dificultades para respirar, ahogo, interferencias en el sueño, somnolencia, problemas ortopédicos, trastornos cutáneos, transpiración excesiva, hinchazón de los pies y los tobillos, trastornos menstruales en las mujeres y mayor riesgo de enfermedad coronaria, diabetes, asma, cáncer y enfermedades de la vesícula biliar. Pero es importante también que a todos estos trastornos físicos deben sumarse los psicológicos, provocados por la discriminación social y las dificultades para relacionarse con los demás, que sufre un niño que no posee una silueta saludable. Además en la infancia el problema puede ser aún mayor por la angustia que provoca en el niño la cruel discriminación de los compañeros del colegio y amigos.
El problema comienza desde la forma y el tipo de alimentación de la madre antes de concebir al niño; continúa con la forma y el tipo de alimentación de la madre durante el embarazo; la forma y el tipo de alimentación de la madre durante la lactancia; la introducción de la alimentación en el bebé, y así continúa la cadena.
Peso ideal
Nadie puede afirmar estar gordo si no conoce su peso ideal, es decir, la cantidad de kilos que según su estatura, sexo y edad, debe pesar.
El peso ideal de cada persona viene marcado por su constitución corporal, su edad y su sexo. Pero, existe una fórmula para saber si se está bien o se cae en la obesidad, el sobrepeso o la delgadez extrema.
La Organización Mundial de la Salud propone un índice para determinar estas situaciones. Se trata del IMC. El cálculo es muy simple; se trata de multiplicar lo que la persona mide, en metros y centímetros, por sí misma, es decir, elevada al cuadrado. Luego, se deben dividir los kilos por la cifra resultante anterior.
Según los expertos, la resultante de esta fórmula indica:
* 30 ó más: indica obesidad
* 25 a 29: indica sobrepeso
* 19 a 24: indica normal
* Menos de 18: delgadez extrema.
Causas de la obesidad
Las causantes de obesidad infantil más comunes son:
- Genéticas: ya que esta enfermedad es frecuentemente diagnosticada dentro de las familias.
- Ambientales: tienen que ver con el estilo de vida, la dieta y el ejercicio del niño, que influyen la expresión de la obesidad.
- Insulinoma: un tumor de insulina puede llevar a la obesidad.
- Alteraciones Hipotalámicas: ciertos tumores, inflamación o traumas a nivel del Sistema Nervioso Central, pueden producir alteraciones en los centros reguladores de la saciedad.
Además, existen otros factores que pueden afectar en los niños.
- Músculos pesados: suele ocurrir que estaturas y contexturas similares, a veces, pesan diferente. Este es un asunto de densidad muscular u ósea. Es decir, hay personas cuyos músculos y huesos pesan más y, sin embargo, no están gordas. Le sucede mucho a los deportistas.
- Asunto de contextura: se habla de tres constituciones corporales y el peso de ellas puede ser perfectamente deferente porque en cada una masa muscular, masa adiposa y esqueleto se reparten de modo distinto.
- Constitución del cuerpo:
1. Longilínea. La sensación óptica es de ser estrecho y alargado. La estatura superior a la envergadura de los brazos; las piernas son largas y la musculatura y el tronco son muy finos.
2. Normilínea. Corresponde al desarrollo armónico de todos los órganos, con miembros bien formados y musculatura media. La estatura corresponde a la abertura máxima de los brazos.
3. Brevilínea. Son personas con las formas cuadradas, con tendencia a la obesidad y una estatura relativamente baja. La musculatura está bastante desarrollada y la fortaleza corporal es evidente y a simple vista.
Otros factores causantes
- Falta de información nutritiva adecuada para los padres.
- Publicidades de comida “chatarra” en los medios de comunicación.
- Falta de implementación de un programa de ejercicios.
- Falta de promoción de alimentos saludables.
- Aumento indiscriminado de restaurantes de comida rápida
- Tiempo de los niños frente al televisor, entre otros.
Tratamiento
La mejor técnicas es que el niño se vigile a sí mismo, manteniendo a diario el ejercicio y la buena alimentación. Si el padre o madre trata de regular la dieta, el plan a veces falla cuando el niño encuentra otras maneras de obtener alimentos.
El doctor Jorge Perochena, jefe del Servicio de Nutrición del Hospital de Niños “Víctor Vilela”, sostiene que “las soluciones no son fáciles, por ser esta pandemia muy extendida; las pautas de alimentación se encuentran motivadas a través de los medios masivos de difusión de deseo como la TV y sus minutos de propaganda, la carestía de determinados alimentos, la falta de preocupación por parte de amplios sectores de la sociedad, los intereses económicos en juego, etc, etc”. Y además agrega: “Los tratamientos dietéticos son adecuados pero la falta de una cultura deportiva es un obstáculo difícil de superar, el juego se ha tornado pasivo, y los padres no acompañan a sus hijos”.
Además, el tratamiento debe ser personalizado y para ello debe efectuarse un buen diagnóstico. Las medidas a tomar básicamente son:
1. Modificar el estilo de vida.
2. Dieta.
3. Ejercicio.
4. Tratamiento Médico según patología específica.
5. Cirugía, para casos refractarios a tratamiento médico.
La forma habitual de definir y clasificar la obesidad es la comparación del peso del niño con el de una población de niños con peso ‘normal’. La realidad es que cada vez se usa más el Índice de Masa Corporal (IMC), pero en el caso de los niños, deben tenerse en cuenta la edad y el sexo, ya que el IMC normal cambia con la edad de forma diferente en niños y niñas.
La obesidad infantil es un gran problema, ya que, en un gran porcentaje, el niño obeso será un adulto obeso. La enfermedad implica además dificultades para respirar, ahogo, interferencias en el sueño, somnolencia, problemas ortopédicos, trastornos cutáneos, transpiración excesiva, hinchazón de los pies y los tobillos, trastornos menstruales en las mujeres y mayor riesgo de enfermedad coronaria, diabetes, asma, cáncer y enfermedades de la vesícula biliar. Pero es importante también que a todos estos trastornos físicos deben sumarse los psicológicos, provocados por la discriminación social y las dificultades para relacionarse con los demás, que sufre un niño que no posee una silueta saludable. Además en la infancia el problema puede ser aún mayor por la angustia que provoca en el niño la cruel discriminación de los compañeros del colegio y amigos.
El problema comienza desde la forma y el tipo de alimentación de la madre antes de concebir al niño; continúa con la forma y el tipo de alimentación de la madre durante el embarazo; la forma y el tipo de alimentación de la madre durante la lactancia; la introducción de la alimentación en el bebé, y así continúa la cadena.
Peso ideal
Nadie puede afirmar estar gordo si no conoce su peso ideal, es decir, la cantidad de kilos que según su estatura, sexo y edad, debe pesar.
El peso ideal de cada persona viene marcado por su constitución corporal, su edad y su sexo. Pero, existe una fórmula para saber si se está bien o se cae en la obesidad, el sobrepeso o la delgadez extrema.
La Organización Mundial de la Salud propone un índice para determinar estas situaciones. Se trata del IMC. El cálculo es muy simple; se trata de multiplicar lo que la persona mide, en metros y centímetros, por sí misma, es decir, elevada al cuadrado. Luego, se deben dividir los kilos por la cifra resultante anterior.
Según los expertos, la resultante de esta fórmula indica:
* 30 ó más: indica obesidad
* 25 a 29: indica sobrepeso
* 19 a 24: indica normal
* Menos de 18: delgadez extrema.
Causas de la obesidad
Las causantes de obesidad infantil más comunes son:
- Genéticas: ya que esta enfermedad es frecuentemente diagnosticada dentro de las familias.
- Ambientales: tienen que ver con el estilo de vida, la dieta y el ejercicio del niño, que influyen la expresión de la obesidad.
- Insulinoma: un tumor de insulina puede llevar a la obesidad.
- Alteraciones Hipotalámicas: ciertos tumores, inflamación o traumas a nivel del Sistema Nervioso Central, pueden producir alteraciones en los centros reguladores de la saciedad.
Además, existen otros factores que pueden afectar en los niños.
- Músculos pesados: suele ocurrir que estaturas y contexturas similares, a veces, pesan diferente. Este es un asunto de densidad muscular u ósea. Es decir, hay personas cuyos músculos y huesos pesan más y, sin embargo, no están gordas. Le sucede mucho a los deportistas.
- Asunto de contextura: se habla de tres constituciones corporales y el peso de ellas puede ser perfectamente deferente porque en cada una masa muscular, masa adiposa y esqueleto se reparten de modo distinto.
- Constitución del cuerpo:
1. Longilínea. La sensación óptica es de ser estrecho y alargado. La estatura superior a la envergadura de los brazos; las piernas son largas y la musculatura y el tronco son muy finos.
2. Normilínea. Corresponde al desarrollo armónico de todos los órganos, con miembros bien formados y musculatura media. La estatura corresponde a la abertura máxima de los brazos.
3. Brevilínea. Son personas con las formas cuadradas, con tendencia a la obesidad y una estatura relativamente baja. La musculatura está bastante desarrollada y la fortaleza corporal es evidente y a simple vista.
Otros factores causantes
- Falta de información nutritiva adecuada para los padres.
- Publicidades de comida “chatarra” en los medios de comunicación.
- Falta de implementación de un programa de ejercicios.
- Falta de promoción de alimentos saludables.
- Aumento indiscriminado de restaurantes de comida rápida
- Tiempo de los niños frente al televisor, entre otros.
Tratamiento
La mejor técnicas es que el niño se vigile a sí mismo, manteniendo a diario el ejercicio y la buena alimentación. Si el padre o madre trata de regular la dieta, el plan a veces falla cuando el niño encuentra otras maneras de obtener alimentos.
El doctor Jorge Perochena, jefe del Servicio de Nutrición del Hospital de Niños “Víctor Vilela”, sostiene que “las soluciones no son fáciles, por ser esta pandemia muy extendida; las pautas de alimentación se encuentran motivadas a través de los medios masivos de difusión de deseo como la TV y sus minutos de propaganda, la carestía de determinados alimentos, la falta de preocupación por parte de amplios sectores de la sociedad, los intereses económicos en juego, etc, etc”. Y además agrega: “Los tratamientos dietéticos son adecuados pero la falta de una cultura deportiva es un obstáculo difícil de superar, el juego se ha tornado pasivo, y los padres no acompañan a sus hijos”.
Además, el tratamiento debe ser personalizado y para ello debe efectuarse un buen diagnóstico. Las medidas a tomar básicamente son:
1. Modificar el estilo de vida.
2. Dieta.
3. Ejercicio.
4. Tratamiento Médico según patología específica.
5. Cirugía, para casos refractarios a tratamiento médico.
Infografía
Índice de obesidad infantil en Rosario
Según el jefe del Servicio de Nutrición del Hospital de Niños “Víctor J. Vilela”, doctor Jorge Perochena “el aumento del sobrepeso es importante. Es muy alta la incidencia actual de esta situación”.
Este gráfico nos muestra cuál es el índice de sobrepeso y obesidad en niños y adolescentes, hoy en día en la ciudad de Rosario.
Además, Invlog consultó al especialista en nutrición qué cantidad de niños hace el tratamiento contra la obesidad en el Hospital de Niños, y nos contestaba: “El número es difícil de precisar por ser estos pacientes derivados desde los centros de salud los días martes y jueves, pero los turnos son completos en estas oportunidades. El número total de historias desde que funciona el servicio es de varios cientos pero no es representativo de lo que ocurre en la población general".
Lo más importante en estos casos es seguir el tratamiento dado por el médico y sobre todo, hacer ejercicios periódicamente.
La obesidad ha dejado de ser sólo un problema estético; su presencia trae serios riesgos para la salud de quines la padecen. Lo más importante ante estos casos es, esencialmente, un plan alimentario bien diseñado junto con un programa de actividad física frecuente.
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